19 mayo, 2024
En Retiro

Las obras en la calle Sargento Cabral están detenidas

Dentro del panorama que presentan para los vecinos las obras de lo que han llamado Entorno Retiro –las correspondientes a las calles Arroyo, Suipacha y otras aledañas- se halla la situación de Sargento Cabral. En esta calle, de una sola cuadra de extensión, con poca circulación vehicular y casi exclusivamente residencial, los trabajos de remodelación han sido de los que más ha sorprendido, ya que no parecían para nada necesarios.

Ahora estos trabajos se encuentran detenidos, lo que trae mayor preocupación y una serie de molestias adicionales a los vecinos. La causa de esa detención -según el dato aportado por algún funcionario en una de las tantas reuniones que hubo con vecinos al respecto- parece ser que la empresa contratista no estaba cumpliendo correctamente con los términos del contrato, por lo que se debió interrumpir la obra; y que ahora debían rescindirlo y contratar a una nueva empresa. Lógicamente eso no puede hacerse tan rápido,  pero mientras tanto quienes allí viven están sufriendo una serie de problemas. Por ejemplo, como los materiales se encuentran allí al aire libre y la calle está sin pavimentar, con gran cantidad de tierra amontonada, los días de lluvia eso se transforma en un barrial, y cuando no llueve hasta el interior de los departamentos se llena de tierra.

Por otra parte al estar cerrada al tránsito hay problemas para el ingreso de los vehículos, incluso los de los garajes de los edificios, lo que hace que también el tránsito por Suipacha se haga imposible. Recientemente, una vecina de esa cuadra graficaba la situación: “Suipacha  es un caos, porque es mano y contramano. Los automóviles que salen de Sargento Cabral, los móviles de la Comisaria 15, los que doblan desde Arenales hacia Sargento Cabral o para ingresar al garage, se juntan con los que salen. Y son terribles los bocinazos que se escuchan cuando eso se produce”. También nos señalaban, en relación a las molestias que todo esto les ocasiona: “Ahora por lo menos han abierto la vereda de la Comisaría hacia Santa Fe, que hasta hace unos días estaba bloqueada, por lo que se convertía en el dormitorio de  los “sin techo”, justo al lado del cajero automático, que ahora luce con un vidrio roto. El camión de caudales que viene a recoger el dinero del Rapipago o reponer lo del cajero, estaciona sobre la ancha vereda del Olivetti, ya casi terminada; y otro problema es el camión recolector de residuos que entra a la calle Suipacha a las 2 y media de la mañana para desocupar el único contenedor que hay para toda la cuadra, y como es obvio tiene que salir marcha atrás”.

De por sí las obras generan molestias, pero eso tiene el consuelo de que son momentáneas. El problema ahora es que al estar interrumpidas, y sin fecha cierta para que se reanuden y menos para que concluyan, la preocupación de los vecinos va en aumento, y es lógico.

FOTO: Así está hoy la calle Sargento Cabral (Foto La Gaceta del Retiro)